HERNÁN VANOLI
Me gustó “House of leaves“, de Mark Z. Danielewski. Es una novela ambiciosa, en la estela pynchoniana, sobre la relación de los estados unidos con su propia imaginación literaria y política. En el rubro ensayo, votaría a “Cultura Mainstream“, de Frederic Martel, porque ayuda a desmontar muchos de los lugares comunes a la hora en que se piensa la industria cultural y su relación con la economía y la geografía económica. Y en ficción nacional me quedo con “El Recurso Humano“, de Nicolás Mavrakis, porque renueva un repertorio de problemáticas en torno a cómo nos habla el lenguaje del marketing online.
JIMENA REPETTO
Esta lista es injusta porque van a quedar varios libros afuera. Intentaré ser breve y precisa como diciembre amerita. Aquí, algunos de los libros que me acompañaron en este 2014:
“Inclúyanme afuera“, de María Sonia Cristoff (Mardulce) es una novela que me gustó mucho de una autora que sigo. “Bellas artes“, de Luis Sagasti (Eterna Cadencia) me parece de lectura obligada. “Mi ángel tiene alas negras“, de Elliot Chaze (Bestia Equilátera) y “Peces sin escondite“, de James Hadley Chase (El séptimo círculo, Emecé) hacen que valga la pena volver, una vez más a la literatura policial. En poesía, “Presente continuo“, de Carlos Battilana (Siempre de viaje) y “abrileando“, de Mariana Kruk (Cacto editorial) son dos libros que disfruté mucho. En otro orden, los ensayos de “Apenas un delincuente“, de Lila Caimari (Siglo XXI) y “Libro de lectura“, de Ángela Pradelli (Emecé) me resultaron muy interesantes. Para terminar esta lista, “Teatro reunido“, de Alejandro Acobino (Biblos) fue una gran lectura de un grandísimo dramaturgo.
Aprovecho para mencionar ciclos de lectura como “Carne argentina”, “Psicofango”, “Club Atlético de Poetas” y “El rayo verde” por donde pasé y escuché muy buenos textos.
Para quienes quieran leer en este verano, la Exposición de la Actual Narrativa Rioplatense ofrece cuarenta títulos online listos para ser descargados.
Ahora trabajo en una novela breve y un libro de poemas de una forma incesante y calma. Mientras, termino una obra de teatro a la que le dediqué gran parte de este año que ya se nos va.
JUAN SALZANO
Los libros que más me gustaron fueron, en poesía:
-“Informe“, de Reynaldo Jiménez.
-“Zodiaca“, de Andrés González.
-“El Cinturón de Kuiper“, de Yaxkin Melchy.
-“Terapia de Vuelo“, de Eduardo Ribé.
-“No es fácil ser un niño poeta“, de Alonso Gordillo.
-“Apertura del Primer Cuarto -La naturaleza de las cosas“, de María García.
-“Interpretación celeste“, de Manuel De J. Jiménez.
-“El tiempo es un texto indescifrable“, de Lauri García Dueñas.
-“Herejía Bermeja“, de Juan Carlos Bustriazo Ortíz.
-“Elegías de la piedra que canta“, de Juan Carlos Bustriazo Ortíz.
Traducciones:
-“Catatau“, de Paulo Leminski, con traducción y estudio preliminar de Reynaldo Jiménez.
-“Ideorrealidades. Poemas y papeles dispersos de la obra futura“, de Saint Pol Roux, con traducción y prólogo de Violeta Percia.
Novela:
-“Minga!“, de Jorge Di Paola (reedición).
Y los libros:
-“Ojo de rapiña“, de Néstor Sánchez.
-“Sueño conjuros desde el vientre de mi madre” (libro-objeto que viene con un CD): cantos de las mujeres mayas de los Altos de Chiapas.
Yo estoy sumergido actualmente en la traducción de “Deleuze Hermético. Filosofía y prueba espiritual” de Joshua Ramey, para la editorial Las Cuarenta.
Y escribiendo mi nuevo libro de poesía: “Hipercolibrí“.
KARINA WAINSCHENKER
Los tres libros que leí que más me gustaron son: “La vida de los insectos”, de Viktor Pelevin, “La fauna divina”, de Bernarda Pagés (Interzona), y “Cómo usar un cuchillo”, de Fernanda García Lao (Entropía). Actualmente estoy trabajando en una novela epistolar entre una joven y su abuela (ya fallecida) pero cuando ésta tenía la edad de la protagonista; es decir, se escriben e-mails que viajan en el tiempo. También estoy trabajando en mi proyecto de investigación de doctorado cuyo tema es la crítica en soporte digital, ¡espero me deje tiempo para seguir creando ficción!
KEKENA CORVALAN
Lo que más me gustó de lo leído:
-“Interruqciones“, Valeria Flores
-“Viaje al fin de la noche“, Louis-Ferdinand Celine
-“El romance de la negra rubia“, Gabriela Cabezón Cámara
Estoy trabajando en textos fragmentarios que combinan escritura teórica y poética. Por supuesto, para que lo publique Ediciones del Bien.
LOLA COPACABANA
Me gustó muchísimo “Lolito“, de Ben Brooks, editada por Blackie Books, en España. Creo que Ben es un tipo talentosísimo y que va a dar mucho que hablar en el futuro: todavía no puedo creer que un pibe nacido en 1992 pueda haber escrito una novela como esta. Me encantó, como casi siempre me encanta ella, “Clèves“, de Marie Darrieussecq: nadie puede narrar el cuerpo femenino como esta francesa. También este año salió la edición de “Ojalá nos perdonen“, de A.M. Homes, una de mis escritoras yanquis favoritas, por Anagrama. Segunda novela de una serie que abrió con “Este libro te salvará la vida” en la que Homes se ubica en una posición más luminosa pero no menos poderosa que en sus primeras producciones. La amo. De Argentina no puedo menos que decir que los libros de Momofuku fueron mis favoritos. Me interesó “Te quiero” de J.P. Zooey, a la que identifico como un primer intento de traslación de todo lo que es la altlit a nuestro país.
Como editora estoy trabajando en el catálogo de Momofuku de 2015. Como escritora estoy terminando de corregir “Alexandr Solzhenitsyn“, novela que voy a sacar el año que viene y en la que utilizo recursos de alt lit y referencias soviéticas varias para plantear algunas preguntas en torno al crimen y al castigo, en especial en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
También estoy traduciendo “Bebé y otros cuentos“, de la maravillosa Paula Bomer: libro que vamos a sacar, si todo va bien, con Momofuku en la primera mitad del año que viene, y que pinta un lado honesto, implacable y muchas veces siniestro de lo que puede estar incluido eso que todos conocemos como el “amor maternal”, y eso que lo incluye pero también puede ser su contracara: el deseo materno.
LUCIANO ALONSO
Si no lo circunscribo a lo nacional, publicado este año, me vuelvo loco. Pensá que yo leo mucho, sumado a los libros en los que laburo, sería una locura que te arme un listado sin ese límite. Entonces, dentro de ese límite (auto impuesto, pero límite al fin) el listado queda así:
1- “Pájaros Ciegos” – Hernán Isnardi – Ediciones La Máquina del Tiempo
2- “Terrible accidente del alma” – Saccomanno – Editorial Planeta
3- “Te quiero” – J.P. Zooey – Editorial Páprika
4- “Viudas, fugas y ecos” – Federico Sironi – Expreso Nova
5- “La libertad total” – Pablo Katchadjian – Bajo la luna
6- “Informe sobre ectoplasma animal” – Larraquy – Eterna Cadencia
7- “Altavista” – Fer Calvi – Hotel de las Ideas
8- “Hacerse la crítica” – A.A.V.V. – Ediciones Biebel
9- “Cuadernos de lengua y literatura vol VIII” – Mario Ortiz – Eterna Cadencia
10- “La masacre de Reed College” – Montes Vera – Dakota Editora
Eso sí, también habría que destacar que, en este listado, estarían quedando afuera: “Todo lo que necesitas saber sobre cine”, de Leonardo D´Espósito – Editorial Paidós y “Subjetivas de nadie”, de Marcos Vieytes – Editorial Entropía.
Y la única razón por la que no los estaría incluyendo es, en honor a la verdad, que han salido demasiado cerca de fin de año y aún no terminé de leerlos. Pero me parece de una evidencia absoluta que, incluso sin haber terminado de leerlos aún, ya merecen ser destacados.
Y lo mismo podría decir de “Sexo, nazismo y astrología, de Terranova. Los tengo ahí, en mi mesita de luz. Son las grandes promesas de este 2014 que me quedó corto.
LUIS ORANI
Este año tuve que viajar mucho a las provincias del NOA por trabajo. Volé en aviones de fuselaje angosto hasta pequeños aeropuertos en diferentes capitales del calor, trabajé bastante y recorrí entre poco y nada. Lo que me dejó fue poder tomar cerveza barata y hacer algunos tweets. Después me pasaron “El momento de debilidad” de Bob Chow y me quise matar. Lo mejor que leí en el año. Un “Impresiones de África” de la aeronavegación comercial, pero en vez de agarrarse del método, baja las defensas: el habla argentina no es un problema y se une con las traducciones para el mercado hispano y el neutro del History Channel. Me gusta que en ningún momento da la sensación de que es un chiste. Es un caza alucinada de perlas negras del comportamiento humano en el tercer mundo.
(También tengo que mencionar, aunque con pudor porque me incluye, al estupendo catálogo que lanzó en cuatro meses Momofuku, un flood del bueno).
Con respecto a qué estoy haciendo ahora, empecé una novela acerca de un tipo que intenta sostener en simultáneo su militancia social, su matrimonio con un fantasma y ser el sidekick de una asesina serial.
MANUEL ALEMIAN
De los libros que leí este año me gustaron “Especificaciones“, de Alejandro Jorge (Editorial Triana, 2010); “Paz o amor“, de Marina Mariasch (Editorial Blatt & Ríos, 2014) y “Humo“, de Walter Lezcano (Editorial Vox, 2013).
De los proyectos, el más importante, y que me olvidé de mencionar en la nota de Augusto, es Rebenque & Alfalfa, unos poemas musicalizados que acabamos de grabar (Bandcamp).
-¿Proyectos?
-Cuentos breves, cómics y el relanzamiento de Ediciones Marfil Seda, los más destacados.
MARÍA MAGDALENA
Mis libros del año: “Celo” de Flor Codagnone y “Lo atenuado” de Javier Galarza, a quienes descubrí como poetas y como personas, igualmente bellos. “Trilogía de la tristeza” de María Malusardi, por conmoverme hasta el llanto en medio de la librería donde lo empecé a leer. “Cuerpos textualizados” de Natalia Litvinova y Javier Galarza, y toda la colección Literatura?Psicoanálisis de Letra Viva, por inciar un diálogo tan necesario. “Los años de peregrinación del chico sin color” de Murakami, porque fue un libro que acortó distancias y que significó el amor. “Nueva correspondencia Pizarnik”, siempre una bendición encontrar más de sus palabras, y “Éramos unos niños” de Patti Smith por dar ganas de vivir.
Por mi parte, atravesando el vértigo de la escritura después de la escritura, vislumbrando un posible próximo libro, e intentando la revolución, siempre.